Control de Calidad
El robot industrial puede participar en el control de calidad usando su capacidad de posicionamiento y manipulación, transportando en su extremo un palpador que le permita realizar un control dimensional de piezas ya fabricadas, tocando puntos clave de éstas. En estos casos suelen utilizarse los robots cartesianos, debido a su precisión, aunque también es válido el uso de robots articulares.
Otras posibles aplicaciones del robot en el control de calidad consisten en utilizar al robot para transportar el instrumental de medida (rayos X, ultrasonidos, etc) a puntos específicos de la pieza a examinar. Los posibles defectos detectados pueden registrarse y almacenarse de la propia unidad de control del robot.
Finalmente el robot, puede ser utilizado como manipulador encargado de clasificar piezas según ciertos criterios de calidad (piezas correctas e incorrectas por ejemplo). En este caso el control y decisión (de a qué familia pertenece la pieza) se realiza mediante un sistema específico que permita comunicarse con el robot, como visión artificial, sistema de pesaje, etc.